jueves, 28 de noviembre de 2013

En la sociedad

En México, ni las instituciones ni el derecho han sido todavía capaces de hacer estallar este cierre social. La nuestra continúa siendo una sociedad fuertemente discriminatoria; nos alejan en todo de la democracia las barreras de entrada que confirman al nepotismo y los privilegios como fuente principal de las oportunidades.
Con el ánimo de colocar este tema en el centro de la futura agenda pública mexicana, a instancias de Ricardo Bucio Mújica, presidente de Conapred, durante el último año y medio el CIDE y tal organismo se dieron a la tarea de elaborar el Reporte sobre la Discriminación en México 2012 (el cual será dado a conocer públicamente este miércoles 24 de octubre).

Participaron en la elaboración de este documento más de 400 personas de muy distintas trincheras e identidades. Se trata de un texto que rebasa las 800 páginas donde se analizan los principales procesos y mecánicas discriminatorias que actúan en 11 campos de la interacción social: proceso penal, justicia civil, salud, alimentación, trabajo, información, expresión, derechos políticos, libertad religiosa crédito y educación.

¿Que hacer?

La desigualdad de trato y la discriminación son sinónimos: se está frente a actos discriminatorios cuando los mejores empleos del país excluyen a las mujeres y los jóvenes; cuando cuatro de cada 10 indígenas mexicanos no tienen acceso al sistema de salud; cuando 9.9 de cada 10 trabajadoras del hogar no cuentan con ninguna prestación formal; cuando 7 millones de personas no poseen acta de nacimiento: cuando ocho de cada 10 habitantes no tienen acceso al sistema bancario convencional; cuando la desnutrición prevalece en las comunidades menores a 5 mil habitantes; cuando siete de cada 10 estudiantes de 15 años están reprobados en matemáticas, escritura y ciencias; cuando las cárceles están pobladas por jóvenes de entre 18 y 30 años, de es casos recursos y bajos niveles de educación; cuando la concentración de los medios electrónicos de comunicación hace que sólo unos pocos puedan expresarse con libertad.

domingo, 10 de noviembre de 2013

En México como en la mayoría de los países existe racismo y discriminación en las diferentes clases sociales, culturas, ideas, forma de vestir, color de piel, altura, todo lo que es el físico, y la distinción de la familia donde uno proviene. En este artículo mencionare algunos puntos donde es muy notorio el rechazo hacia ciertas personas que cuentan con los mismos derechos, en algunos profundizare un poco solo mencionare lo que se considera importante en la actualidad visto de una forma totalmente real. En esta página podrás encontrar toda la información acerca de la discriminación en México, así como también como podemos tomar conciencia de evitarla.

¿Que es la discriminación?

La discriminación es un acto de una persona o un grupo de personas a partir de criterios determinados. Creerse superior a otra persona y así, maltratarla física y/o mentalmente causando efectos negativos en la otra persona. En su sentido más amplio, la discriminación es una manera de ordenar y clasificar otras entidades. Puede referirse a cualquier ámbito, y puede utilizar cualquier criterio. Si hablamos de seres humanos, por ejemplo, podemos discriminarlos entre otros criterios, por edad, color de piel, nivel de estudios, nivel social, conocimientos, riqueza, color de ojos diferente, orientación sexual, etc. Pero también podemos discriminar fuentes de energía, obras de literatura, animales etc.

En la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación (México), se considera discriminación a "toda distinción, exclusión o restricción que, basada en el origen étnico o nacional, sexo, edad, talla pequeña, discapacidad, condición social o económica, condiciones de salud, embarazo, lengua, religión, opiniones, preferencias sexuales, estado civil o cualquier otra, tenga por efecto impedir o anular el reconocimiento o el ejercicio de los derechos y la igualdad real de oportunidades de las personas".
No obstante, en su acepción más coloquial, el término discriminación se refiere al acto de hacer una distinción o segregación que atenta contra la igualdad. Normalmente se utiliza para referirse a la violación de la Ley de igual libertad y la igualdad de derechos para los derechos individuales de los individuos por cuestión social, crecimiento humano edad, razas humanas racial, religión religiosa, política, orientación sexual o por razón de género.

Ejemplos de discriminación


 Algunos ejemplos claros de conductas discriminatorias son:
1.- Impedir el acceso a la educación pública o privada por tener una discapacidad, otra nacionalidad o credo religioso.
2.- Prohibir la libre elección de empleo o restringir las oportunidades de acceso, permanencia y ascenso en el mismo, por ejemplo a consecuencia de la corta o avanzada edad.
3.- Establecer diferencias en los salarios, las prestaciones y las condiciones laborales para trabajos iguales, como puede ocurrir con las mujeres.
4.- Negar o limitar información sobre derechos reproductivos o impedir la libre determinación del número y espaciamiento de los hijos e hijas.
5.- Negar o condicionar los servicios de atención médica o impedir la participación en las decisiones sobre su tratamiento médico o terapéutico dentro de sus posibilidades y medios.
6.- Impedir la participación, en condiciones equitativas, en asociaciones civiles, políticas o de cualquier otra índole a causa de una discapacidad.

7.- Negar o condicionar el acceso a cargos públicos por el sexo o por el origen étnico.

 Es importante mencionar que las personas con discapacidad, adultas mayores, niñas, niños, jóvenes, indígenas, con VIH, no heterosexuales, con identidad de género distinta a su sexo de nacimiento, migrantes, refugiadas, entre otras, son más propensas a vivir algún acto de discriminación, ya que existen creencias falsas en relación a temerle o rechazar las diferencias. No obstante, debemos estar conscientes de que las personas en lo único que somos iguales, es en que somos diferentes.
En México, la insatisfacción con la democracia tiene distintos orígenes, y sin embargo, uno se coloca como principal: el régimen de la pluralidad ha sido ineficaz a la hora de acortar las desigualdades y confrontar los privilegios. Un segmento amplio de mexicanas y mexicanos se percibe tratado injustamente y con asimetría por la autoridad, la ley y las demás personas. No importa el campo de interacción social que se aborde la educación, la salud, la justicia, el mundo del trabajo, la libertad, una y otra vez nos topamos con un cierre social construido explícitamente para asegurar la exclusión.
Se asume que nuestra principal desigualdad es económica y que para medirla basta con observar las diferencias siderales que hay en el ingreso cuando el 20% más rico de la población se queda con cerca de 53% de la riqueza nacional, y la mitad de los habitantes vive en pobreza, el tema de la inequidad en el salario no puede ser menospreciado.
Sin embargo, la asimetría en el ingreso no es la única relevante. Actúa junto con ella su hermana siamesa: la desigualdad de trato. Desde el resorte cultural y también desde las instituciones, se fabrican estigmas, marcadores y prejuicios sociales, disponibles para que grupos abultados de personas sean apartados de los derechos las libertades y los bienes obtenidos por el esfuerzo común.
La desigualdad de trato y la discriminación son sinónimos: se está frente a actos discriminatorios cuando los mejores empleos del país excluyen a las mujeres y los jóvenes; cuando cuatro de cada 10 indígenas mexicanos no tienen acceso al sistema de salud; cuando 9.9 de cada 10 trabajadoras del hogar no cuentan con ninguna prestación formal; cuando 7 millones de personas no poseen acta de nacimiento: cuando ocho de cada 10 habitantes no tienen acceso al sistema bancario convencional; cuando la desnutrición prevalece en las comunidades menores a 5 mil habitantes; cuando siete de cada 10 estudiantes de 15 años están reprobados en matemáticas, escritura y ciencias; cuando las cárceles están pobladas por jóvenes de entre 18 y 30 años, de es casos recursos y bajos niveles de educación; cuando la concentración de los medios electrónicos de comunicación hace que sólo unos pocos puedan expresarse con libertad.



El cierre social coloca de un lado a las mujeres y del otro a los varones, confronta la ascendencia indígena con la europea, a los jóvenes contra los adultos, a los heterosexuales contra los homosexuales a quienes practican una religión mayoritaria contra los que sostienen una fe distinta; distancia a partir de la clase social, la apariencia física, el lugar de nacimiento, el color de la piel y un largo etcétera de elementos que son fáciles de comunicar y sobre todo eficaces a la hora de someter.


En México, ni las instituciones ni el derecho han sido todavía capaces de hacer estallar este cierre social. La nuestra continúa siendo una sociedad fuertemente discriminatoria; nos alejan en todo de la democracia las barreras de entrada que confirman al nepotismo y los privilegios como fuente principal de las oportunidades.


Con el ánimo de colocar este tema en el centro de la futura agenda pública mexicana, a instancias de Ricardo Bucio Mújica, presidente de Conapred, durante el último año y medio el CIDE y tal organismo se dieron a la tarea de elaborar el Reporte sobre la Discriminación en México 2012 (el cual será dado a conocer públicamente este miércoles 24 de octubre).

Participaron en la elaboración de este documento más de 400 personas de muy distintas trincheras e identidades. Se trata de un texto que rebasa las 800 páginas donde se analizan los principales procesos y mecánicas discriminatorias que actúan en 11 campos de la interacción social: proceso penal, justicia civil, salud, alimentación, trabajo, información, expresión, derechos políticos, libertad religiosa crédito y educación.

Cultura en México

En México aún existen personas que se resisten demasiado al cambio, con una cultura excelente y de mucha riqueza, pero con una mentalidad no muy amplia que se pueda decir, esto hace que México este desproporcionado en su riqueza, ya que son muchos los que viven en pobreza, son pocos los que tienen una estabilidad económica.
La clase alta trata de manejar la mayor parte del país, se crean monopolios, y se identifica por completo quien es importante y quien no lo es, estas personas de gran riqueza no permiten que personas como los indígenas en nuestro país crezcan y de esta forma provocar que se  estanquen de una manera muy agresiva.
Del concepto raza sale el término Racismo este distingue la diferencias de identidades y culturas, entre otras cosas.
La xenofobia, considerada como la base del racismo, es uno de los prejuicios con recelo, odio, fobia y rechazo contra los grupos étnicos diferentes, cuya fisonomía social y cultural se desconoce.


Porque diferenciar las razas, y ver con odio a las personas distintas a nosotros?….. “Todos somos iguales”…., esta frase la dirá una persona racista?, Realmente si lo somos  de eso no hay duda alguna, por circunstancias diferentes, con distintas ventajas y desventajas, en familias, países, ciudades,  gente  diferente  nos hace tener cierta esencia como personas. La raza que cada quien tiene y comparte con otra gente es totalmente respetada, pero no es base de burla o rechazo,  todos como seres humanos tenemos por naturaleza la necesidad de tener contacto con gente, sin importar el color de su piel, el físico, la religión, la cultura, no podemos crear prejuicios de esta magnitud creyendo y transmitiendo el temor a la gente negra en caso de ser blanco, el odio a los extranjeros, el repudio a los aborígenes, no somos nadie para hacerlo.

Influencia de los medios de comunicación en la discriminacion

A menudo los medios de comunicación insisten en las diferencias culturales, presentando las costumbres y los actos culturales ajenos como cosas raras y sorprendentes. De esa manera también fomentan hostilidad, se impulsa la xenofobia contra los extranjeros (africanos, asiáticos o latinoamericanos), y se crea así la exclusión y rechazo.
En el caso mexicano, el tipo de racismo que mejor se puede identificar son las conductas de discriminación y la víctima son los 62 grupos indígenas que comparten el territorio nacional con nosotros.
El crecimiento y desarrollo de México se basó, en gran parte, en la marginación y pobreza de los pueblos indígenas. Las poblaciones indígenas pertenecen a una clase socio económica baja. Algunos indígenas pasan toda su vida en medio de la pobreza, para que después de tanto esfuerzo les quiten sus tierras. Muchos de ellos han sido marginados a tal punto que cambiaron sus vestimentas, su idioma y hasta su identidad por temor al fracaso social, discriminación y malos tratos.